viernes, 5 de febrero de 2016

El sexo débil en la mente

Una Margarita sin emotividad

                                   La Plataforma: Yo con México
                                         https://www.youtube.com/watch?v=seSd1h9ZgXI

Hemos visto a Margarita Zavala con sus playeras de la selección mexicana o sus jersey gringas, la hemos visto ahí en las gradas, en los asientos disfrutando la pasión por el futbol nacional mexicano o el americano. ¿Pero cuál es la euforia en su vida?; o la pregunta sería ¿por qué ella estaría dispuesta a luchar? La poesía urbana de un rapero o atrae a multitudes, hace que varios viajeros encuentren un lugar al estallar en sus versos. La pregunta es clara: ¿Cuál es la emoción en la vida de Margarita Zavala?

Los que tienen padres que nacieron en la segunda guerra mundial dicen que les tocó ir a la misa católica dónde el sacerdote les daba la espalda, y toda la homilía era latín. En el video vemos a una Margarita Zavala aventándose un sermón sacerdotal a la gente que la quiere y la ama, y ellos son incapaces de criticarla. Todos la escuchan con respeto, pero vemos a la gente cansada de discursos, de “choros”. Los que conocen a la esposa de Felipe Calderón se enamoran de ella por su sencillez, humildad, y esa paciencia y capacidad tremenda de escuchar, y sus extrema sinceridad con la que habla, pero seguimos viendo a una Josefina Vázquez Mota que habla ante un Estadio vacío.  

Las cuerdas vocales de María Corina Machado cuando habla causa temblor en sus rivales por cada silaba que resuena de su boca, cuando escribe tiemblan muchos oficialistas: su voz y su mano tiene poderio. Hillary Clinton es una mujer carece de emociones, pero tiene una mirada firme y su caminar es recto y no se hace a lado ni aunque tenga un tanque enfrente de ella; es capaz de subirse en él, pasarle por encima y seguir adelante ¿Pero qué hay con Margarita Zavala? Aunque Denise Dresser sea su guionista de sus discursos, ella necesita llenar de inmensidad a la gente con sentimientos

Margarita Zavala se dice apasionada del deporte, pero la vemos festejar muy prudentemente. Las señoritas son modestas, educadas, refinadas, mesuradas en sus expresiones. También decían que nuestro lugar es debajo de un hombre en la cama, en la familia y en la sociedad. Pero como dice América Pacheco (amiga de Yuriria Sierra) “Al diablo con todo eso”: Las Tontas no Van al Cielo. Sin duda, la mesura de Margarita Zavala, su inteligencia y su angelical ser la hacen un ser hermoso en todos los aspectos, pero con eso no se llega a ganar nada.

Cada palabra que emita debe sentirla, vivirla, como aquellos poetas callejeros que hoy están de moda. La señora Zavala nos presume a su padre el maestro de la UNAM y sus orígenes de la clase media, pero no vemos que en su vida política hacia las personas trasmita sus orígenes. Debe hacer llegar sus intenciones en el fondo de las personas para que se queden ahí, ya no debe leer, no debe censurarse, ni limitarse en su hablar, para que una palabra sea suficiente para decir: Ahí está Margarita Zavala. ¿Qué no entiende que se debe preparar bien? desde el momento en que se encamina al templete y sube para leer en el atril, hasta en la forma que baja de él.

Por confiarse Hillary, cayó hasta el tercer lugar en las presidenciales como una Vázquez Mota; por imposición de las personas, limitan a María Corina a tomar una presidencia que a pulso se ha ganado. Ellas, teniendo el apoyo que tienen, el respaldo de personajes importantes, y poseyendo los méritos que han juntado con esfuerzo los han echado en saco roto: no viven en las personas que las apoyan; ellas mismas se hicieron el sexo débil como una Margarita Zavala, que cree que su esposo y su prima le cortaran las alas en su vuelo libre (ni un Alex Sintek ni una Xóchitl Gálvez)



Y contrariando a Lilly Téllez: Margarita Zavala es Margarita Zavala las 24 horas del día, y más que tener una soberbia como un Andrés Manuel López Obrador de aferrarse a ser presidente, ella es más cercana a un México de la clase pobre que ni el Peje conoce. Y la única razón que le doy a Liliana, es que ella se hace inferior en su dignidad austera en la cual estuvo en contacto como ex primera dama y cuya labor se la tomó en serio: la comunicación con los sectores olvidados. Liliana Téllez tiene razón, ella es su único enemigo, que se acompleja y que no hace vibrar con su voz ni su sentir.

http://www.reforma.com/aplicacioneslibre/preacceso/articulo/default.aspx?id=81141&urlredirect=http://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=81141
http://www.milenio.com/firmas/alvaro_cueva_ojoporojo/Margarita-Zavala-critica-sensible_18_670912926.html