Prejuicio psicológico

Lo que hay en el fondo

Barack Obama gana la presidencia de Estados Unidos, y Marco Rubio y Ted Cruz piensan en sus casas: 

-"Los norteamericanos ya están votando por los negros ¡YO SOY LATINO! ¡Yo puedo ganar en el 2016!"

Sin dudarlo, la comunidad latina como los cristianos son predominantes en los Estados Unidos, son los que le otorgaron a Obama el triunfo, pero lo que no contaron estos dos sujetos, es en la naturaleza de las razas. 

Los cubanos como los mexicanos son muy "a la Ley de Herodes" (Película de Luis Estrada) Y ellos son como la jueza Carmen Arroyo en "Caso Cerrado" los muestran tal como son: muy individualistas. Como son los norteamericanos blancos y de color, no tardaron en olvidar estos nombres de estos latinos, tratando de alcanzar la nominación, y mezclaron sus nombres: "Marco Cruz" y "Ted Rubio" En tanto que los hispanos (los chicanos, pachuchos o cholos), -la raza mexicana en Estados Unidos- tal vez sí los distingan, pero ellos no encontraron afinidad por la simple razón de que están más olvidados de sus orígenes cuyos nombres y apellidos portan desde el día que nacieron estos senadores, y sólo ven dos personas ambiciosas que entre ellos mismos se anulan el voto latino por su visible egoísmo y rivalidad.

Tal vez Disney ya tenga princesas asiáticas, rusas, escandinavas, y negras. Tal vez en sus series de televisión hayan razas y nombres de negros, hindus, chinos y mexicanos, pero los norteamericanos son "racistas" en su cultura. Donald Trump y Hillary Clinton son blancos y de ojos claros, y aparte de ellos son jóvenes visualmente. 

El Bernie Sanders de 1985 tenía espeso cabello negro, tenía ojos vivos de rebeldía, er muy guapo, pero el Bernie de hoy inspira lástima, al no haber madurado. Sanders es como Dick Cheney o López Obrador, son viejios necios, con sus ideas revolucionarias de su juventud: "les ganó la edad", son tercos. Es lo que se ve y se percibe. Bernie Sanders y Hillary podrán haber sido hippies, habrán escuchado a los Beattles, y tal vez hayan ido al festival de Woodstock, pero unos maduraron sobre esa etapa rebelde de ideales como los de John Lenon,.y miraron sus países tal y como son. Estados Unidos es como la India, pero hay sectores poblacionales e ideologías que predominan.

Norteamericanos: Cristiano, patriota, amante de las armas y de la caza, turísta internacional, y justiciero universal El GI Joe americano, el Capitán América, el Mel Gibson que se arrodilla ante Dios con un arma poderosa estilo Duro de Matar, el Spring Breaker que quiere sexo o desnudarse en playas extranjeras, el se toma la selfie con el animal que fue a cazar, el que sueña con accionar una ametralladora o lanzar un misil desde un helicóptero a los enemigos de América, y que quiere ser condecorado con una medalla al valor por su presidente. El americano no ha cambiado mucho, y MTV nos ha mostrado en su paso del tiempo en su sarcasmo de la vida del estadounidense común estas ideologías, como hicieran los Simpson o Futurama.

Nueva York es el foco de atención para Hillary, que ha sido aceptada por los hispanos del sur con mucho agrado, ya que Donald Trump ganó sin problemas NY y con un mayor porcentaje. No me cabe duda de que ella es la más cercana para derrotar al racista de Trump y será nominada, pero Donald le está ganando visualmente en juventud, Hillary ya no es tan hermosa, y su voz ya se quiebra. La edad de ella, y el factor de Trump de jugar con el miedo al terrorismo del americano, y de remarcar que él es un empresario millonario y exitoso, le restan votos a Hillary Clinton que tiene demasiado apoyo internacional, de celebridades y estrellas. Trump es misogino y racista (por lo que se le diga Hitler-Trump en toda la tierra), pero los estadounidenses ya no quieren más impuestos, quieren vivir mejor y con menos preocupaciones; no les importa que un imbécil los gobierne, si ellos viven bien, según lo que les ofrece este personaje nefasto.

Si Hillary quiere ganar, tendrá que sacar algo más poderoso que las hermanas Spears, Y SATISFACER, a los americanos en su instinto innato de sus generaciones. Trump es su campaña de odio le podrá decir a Hillary que es una David Crooket: ese apodo no le hace ni consquillas al verdadero problema que ella tiene: el llenar a los americanos como Trump lo hace desde su campaña de amor.. 

@BIGSHOWGIRL